El viaje que más me ha marcado hasta hoy ha sido el primero que hice con mi instituto a Inglaterra, donde se podría decir que por primera vez tuve que valerme por mi misma al no tener cerca a mi familia. Nunca había montado antes en avión, fue al despedirme en el aeropuerto de mis familiares, cuando me di cuanta de lo que estaba por venir. Durante 5 días estuve viviendo con una familia inglesa, recibiendo clases y haciendo turismo por las calles de Bristol y Torquay. Todo fue increíble, pero el dato a destacar de este viaje fue que pasados los 5 días, un inesperado suceso impidió nuestro regreso. Las cenizas de un volcán islandés mantenían cerrado el espacio aéreo de media Europa. No podíamos volver a casa, y no sabíamos durante cuanto tiempo se extendería nuestra estancia allí... . Pero por extraño que parezca lo mejor del nuestro viaje estaba por venir. Hicimos turismo a más no poder, tuvimos la oportunidad de hablar en inglés lo que nunca habíamos hablado antes, y pasamos unos días viviendo al más puro estilo británico, hinchándonos a comer en el desayuno, y cayendo rendidas en la cama ¡a las 7 de la tarde! Pero el problema aéreo tan solo duro un par de días obligándonos así a volver en cuanto tuvimos la ocasión. Pero me quedo con muy buenos recuerdos y estoy convencida de que en algún momento de mi vida volveré a visitar a los ingleses. Quizás durante un tiempo indefinido...
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miércoles, 4 de enero de 2012
England, England, England !
El viaje que más me ha marcado hasta hoy ha sido el primero que hice con mi instituto a Inglaterra, donde se podría decir que por primera vez tuve que valerme por mi misma al no tener cerca a mi familia. Nunca había montado antes en avión, fue al despedirme en el aeropuerto de mis familiares, cuando me di cuanta de lo que estaba por venir. Durante 5 días estuve viviendo con una familia inglesa, recibiendo clases y haciendo turismo por las calles de Bristol y Torquay. Todo fue increíble, pero el dato a destacar de este viaje fue que pasados los 5 días, un inesperado suceso impidió nuestro regreso. Las cenizas de un volcán islandés mantenían cerrado el espacio aéreo de media Europa. No podíamos volver a casa, y no sabíamos durante cuanto tiempo se extendería nuestra estancia allí... . Pero por extraño que parezca lo mejor del nuestro viaje estaba por venir. Hicimos turismo a más no poder, tuvimos la oportunidad de hablar en inglés lo que nunca habíamos hablado antes, y pasamos unos días viviendo al más puro estilo británico, hinchándonos a comer en el desayuno, y cayendo rendidas en la cama ¡a las 7 de la tarde! Pero el problema aéreo tan solo duro un par de días obligándonos así a volver en cuanto tuvimos la ocasión. Pero me quedo con muy buenos recuerdos y estoy convencida de que en algún momento de mi vida volveré a visitar a los ingleses. Quizás durante un tiempo indefinido...
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